Suicidio de una drogadicta en una mañana bonita

Estaba demasiado drogada, acostaba sobre mi cama. Sentía que el techo me atacaba y sofocaba, tuve la necesidad de ver el cielo, de romper el techo, agarre la escoba y me puse a abrir un agujero, gritaba y reía, me sentía con libertad, y mal, por todo lo que venia, rayos, el techo no cede, es muy fuerte. Mire la ventana, vi un cielo celeste con nubes hermosas y pomposas, la abrí y me arroje al vacío. Mire un bello cielo, cerré los ojos y sentí que el tiempo no pasaba,hasta que sentí la ambulancia.